viernes, 20 de noviembre de 2009

Adulthood y no volver

Dice Anotonio Muñoz Molina, que ser adulto consiste en vivir con un poco de desilusión y un poco de ilusión. Cualquiera de los extremos pertenece a la adolescencia. (Perdida en la biblioteca el otro día con mi compañera de cuarto encontré el libro "conversaciones con escritores".)

He decidido por fin qué voy a hacer en Navidad. Me quedo aquí, bueno, de hecho me iré a California. No vuelvo a España. Repito: NO VUELVO A ESPAÑA. He tardado mucho en decidirme. Ayer llamé para concertar cita en Madrid para renovar el visado y todo. Pero luego me puse a pensar.

Sé lo que hay en España. Volver, estar con la familia, 5 días en Valencia, 7 días en la playa, otra vez en un pueblo y la sensación de estar de pegote y de estar pensando que podría estar en otro sitio, visitando cosas nuevas.

Era buena idea volver porque sí echo de menos a la familia y serán 6 meses más sin verles. Y volver también me haría darme cuenta de lo que me gusta de aquí y de lo que no me gusta de España.

Supongo que cualquiera de las 2 opciones era válida.

Quiero aprovechar las oportunidades y quiero quitarme de encima lo malo de España, me cuesta muchísimo hacerme a la idea de que un día tendré que volver y enfrentarme a todo lo que me daba asco y lo que me daba pesadillas. California suena estupendo. Será una aventurilla. Aunque no me gusta mucho la amiga con la que me voy.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Main Stacks

Pronto hará 3 meses que llegué y se nota. La sensación de excitación inicial ha pasado (menos mal) para dar paso a empezar a encontrar mi sitio. Al principio con toda la emoción de conocer gente nueva, adaptarte a (todo) horarios, gente, costumbres, casa, clima..., me disolvía.

Estoy empezando a hacer las cosas que me gustan, esto no tiene por qué ser bueno, volverme a enganchar a la liga de balonmano danesa por ejemplo, jeje. No, es broma, pero ya vuelvo a leer con gusto y a ver películas. Esto es una gran cosas porque esta biblioteca es de las más grandes del mundo, con 10 millones de volúmenes. En realidad son unas 20 bibliotecas en el campus. Había visitado varias, ingenieros y un par más, pero el edificio de la principal me daba un poco de miedo. Supongo que tiene que ver con que está dividido en ala este y ala oeste, recordándome la zona prohibida en "la Bella y la Bestia". Es mucho más terrorífico una vez entras.


La puerta a los Main Stacks está en el 2º piso del edificio. Tienes que enseñar el carnet y una tarjeta especial, quieren asegurarse de que si entras no te pierdas (con razón). Una vez te introduces en los Main Stacks, te encuentras con que estás en el piso 5º (hay varios pisos subterráneos), en total creo que hay 8. En cada piso hay 2 alas, separadas por unas puertas metálicas que dicen "refugio para tornados", ocasionalmente el techo se vuelve más bajo y la iluminación cambia, hay luces blanquecinas de hospital y luces amarillentas de bombilla desnuda.


Pero lo que me da pesadillas son las estanterías. Son filas y filas de estanterías que se pliegan y despliegan con un mecanismo. Cuando entro a coger uno de los libros que están más hacia el centro - final de la estantería me inquieto. Hago cálculos mentales para convencerme de que si por alguna causa se activa el mecanismo conmigo dentro, podré escapar.


Por supuesto me encanta ir a la biblioteca, aparte de los tropocientos libros que tiene, el ambiente es muy interesante. Hay sillas esparcidas por ahí, todas de madera, pequeñas, viejas y que crugen. El sitio solo ya te cuenta mil historias.